Banner

Banner

El búmeran

Un búmeran, ó boomerang en inglés, es un artilugio deportivo que es capaz de retornar a su punto de lanzamiento. Puede adoptar casi cualquier forma y se fabrica con muy variados materiales: madera, plástico, aluminio… Hoy estoy fabricando uno. Será muy hermoso y tendrá muchos colores: rojo, naranja, amarillo, verde, azul. ¿La forma? No importa tanto, tal vez circular, redondeado, no lo sé, como tú quieras. ¿Te lo puedes imaginar? ¡Muy bello! Pero lo más importante no es cómo se ve, sino lo que va a repartir a su paso: amor, palabras de aliento, favores, sonrisas y perdón.



Desde hace mucho tiempo he luchado contra el odio que se encuentra a mi alrededor. Odio irracional, injustificado y completamente sin sentido que flota en el aire, gracias a todas las personas que lo esparcen por todas partes.

-Con comentarios negativos sobre los demás, que generalmente están motivados por frustración, celos ó envidia. Criticando todo y a todos, normalmente basando estas críticas en opiniones pobres y pre-juiciosas. ¿Por qué no se puede sentir felicidad cuando otra persona tiene éxito ó es feliz?

-Inventando rumores y diciendo mentiras, solamente porque disponen de cantidades ridículas de tiempo para invertir en repartir odio. Sin embargo, estas “joyitas” no dedican energía a actividades positivas: voluntariados , obras de caridad. Y si lo hacen, se regodean de su hazaña para que todos lo sepan.

-Discriminando lo que es distinto: otro color de piel, otra preferencia sexual, otra religión, otra posición social, otra manera de ser y de vivir… La mayoría de las veces ni siquiera conocen lo que juzgan. Crean en su mente ideas que creen ciertas y las convierten en su verdad absoluta. Son tan inseguros que cualquier diferencia en los demás les provoca resentimiento, porque ellos mismos no se atreven a ser originales, a pensar abiertamente y, por lo tanto, no saben cómo dejar de ser críticos. Qué pena me dan estos seres. Son “corazones sonámbulos” que caminan por el mundo siendo infelices. Lamentablemente, a la infelicidad no le gusta vivir sola, por lo que atrae a más seres patéticos para crear pantanos de miseria.

Estoy demasiado cansada de esta lucha, demasiado abrumada por tanto rencor. He decidido que todas estas personas no arruinarán más mis días. No tengo tiempo para eso. La vida se va y se acaba, transcurre muy rápido. A partir de hoy, mi tierra no será fértil para el odio, sólo para el amor. Podría seguir acumulando piedras en mi maleta y cargando todo este peso innecesario. ¿Para qué?

Por el contrario, hoy cargaré mi búmeran con amor, paciencia, favores, buen humor, sonrisas, bellas palabras, comentarios agradables, canciones… Y lo lanzaré al mundo como se deja libre a una paloma mensajera: esperando que regrese.

¿Quieres unirte a mí? Ven conmigo. Construye tu búmeran. Despójate de la basura, de los prejuicios, del dolor. Eres demasiado hermoso (a) para llevar toda esa podredumbre en tu corazón. Una vez que lo hagas, sentirás como un gran peso se te quita de encima. Ya puedes ser tú mismo sin importar lo que los demás piensen. Ya no tienes que criticar cualquier vestido ó mal peinado. Ya no tienes que tener una opinión sobre la vida de nadie. ¿No sería grandioso que camináramos juntos (as) por este camino sin quejas, sin odio, sin rencor, sin inseguridad, sin distinciones? ¡La vista es magnífica! Te estoy esperando.



¡Lanza tu búmeran!